Mieles Premium
¡Sin preservantes y sin conservantes!
¡Libre de pesticidas y otros contaminantes!
El uso de la miel tiene sus raíces en los primeros asentamientos humanos que se conocen por registros de descubrimientos arqueológicos que datan de 7000 a.C. También se sabe que hay mención escrita en tablillas Sumerias (tablillas escritas en la lengua de una antigua cuidad llamada Sumaria), que están fechadas aproximadamente entre los años 2100-2000 a.C. En éstas se menciona el uso que se le daba a este producto por sus características nutricionales como medicinales.
La miel ha sido considerada una de las medicinas más antiguas y en muchas etnias ha sido prescripta como medicamento para curar quemaduras, o manchas de sol. En particular, los egipcios la utilizaban para la conservación de los cadáveres y de manera empírica demostraron que tiene un alto poder antiséptico, así como también curativo y cicatrizante de las heridas. En la actualidad popularmente se la utiliza con fines terapéuticos, por ejemplo para el dolor de garganta, terapia para piernas ulcerosas infectadas, dolor de oídos, etc.